El paisaje de Madrid huele a basura política y habla de solidaridad.
Hoy con los barrenderos, ayer con los maestros y sanitarios, mañana quizás, contigo y conmigo.
El paisaje de Madrid es la decadencia de una época de esplendor en la hierba. De un despertar en la oscuridad de un túnel de única dirección: la perdición de derechos de millones de trabajadores. No sólo son los barrenderos de Madrid. Somos todos los españoles del mundo. Que votamos y nos indignamos; nos indignamos y volvemos a votar. Como si no hubiera más que hacer. Como si tan solo pudiéramos avalar con nuestro voto a quienes no tienen interés en hacer el bien, salvo para ellos mismos. Como si no hubieran otras direcciones. Como si no pudiéramos detener la marcha hacia el lado oscuro. Como si no pudiéramos inventar una nueva realidad...
Así nos están dejando. En el túnel hacia la oscuridad que nos ciega y nos ensordece, que nos insensibiliza y nos conforma anulando cualquier débil intento.
Como aquellos borreguitos que pacen felices hacinados en un corral. Esperando la hora en que les lleven a esquilar.
Hoy amaneces pisando fuerte con tus letras y llegas a nuestros rincones.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo en que ese grupo que se manifiesta, barrenderos, sanitarios y maestros, es una representación de todos nosotros, de lo que ocurre en nuestra sociedad y que, de momento, se ve muy oscura su solución.
Siempre me digo que hay que tener paciencia y saber esperar, pienso en el futuro de mis nietos ¿qué les tocará vivir?
Te dejo un fuerte abrazo con mis cariños.
Kasioles
Si esta es la basura de la Casta, ¿cómo será la de la Susana? Nos toman el pelo: primero no llaman a las cosas por su nombre y en lugar de privatizar externalizan, pero mira usted por dónde cae en manos amigas... Madrid se merece otro alcalde y con urgencia, y España entera merece otros gobernantes, pero no sabemos si existen.
ResponderEliminarUn beso.
Todos sentimos merecer algo mejor. La cosa es que tenemos que organizarnos. El pandillerismo político y sus directivos los banksters si que lo están.
ResponderEliminarImaginate que en vez de hacer cada uno la guerra por nuestra cuenta nos unieramos todos en la calle, se acojonarïan? a lo mejor entonces les entraba el miedito en el cuerpo.
ResponderEliminarunos besotesssssssssssssssssss
lo de la basura, un episodio más de esta cadena de incompetencia y corrupción (que hoy por hoy parece interminable)
ResponderEliminarbesos,
Estupendo artículo-reportaje, Mascab. ¡Muy bueno!
ResponderEliminarDiríase, que la clase política de esa hermosa ciudad que es Madrid ha vertido su vómito de corrupción en sus calles; las entrañas de aquella ya no soportan tanta podredumbre.
¡Saludos!
Me parece que ya estamos esquilados, la próxima visita será para no volver, ya sabes corderitos asados.
ResponderEliminar¿porque nos duele tanto y seguimos quietos?
Un abrazo
SUelo visitar Madrid a mediados de Noviembre. Este año he faltado a esa especie de tradición y no me he arrepentido.
ResponderEliminarEntre todos conseguirán regresar a tiempos oscuros!
Excelente entrada.
Saludos!